, «El comedor ha sido bendecido con una donación de importancia que le permitirá funcionar sin sobresaltos durante los próximos meses»
Por otro ala, se descuida el mandato del Señor Cristo: predicar el evangelio y hacer discípulos. Hogaño, aparte raras excepciones, no se predica el verdadero evangelio ni se instruye como es debido acerca de lo que el Señor ha demandado específicamente para su Iglesia.
debe conocer que ha sido libertino del cumplimiento de la condición. Porque si determinado en su ignorancia quiere cumplir aunque sea una parte de la índole, como por ejemplo topar el diezmo, ¡es maldito! Pues, la Escritura dice:
Lo importante es: Esta frase se utiliza para centrar la discusión en lo que se considera crucial en un tema específico.
Porque si primero se tiene dispuesta la voluntad, se acepta según lo que unidad tenga, no según lo que no tenga. Pero no digo esto para que haya para otros alivio y para ustedes estrechez, sino para que haya igualdad.
Por todo lo expuesto anteriormente, los grandes y reconocidos siervos de Dios a través de la historia de la Iglesia no se dedicaron a predicar sobre el diezmo. No se encuentran registros de que lo hayan hecho, sean estos: Apóstoles, Padres de la iglesia o predicadores de la SANA DOCTRINA como Calvino, Lutero, Moody, Spúrgeon y tantos otros.
En síntesis: Es más importante ejercitarnos en los principios fundamentales de la Clase a través de lo que nos revela el espíritu de la letra, que caer en el mismo pecado de hipocresía como los escribas y fariseos.
Que en grande prueba de tribulación, la riqueza de su Fruición y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su desprendimiento. Pues doy testimonio de que con afabilidad han dado conforme a sus fuerzas, y aún más allá de sus fuerzas, pidiéndonos con muchos ruegos que les concediésemos el privilegio de participar en este servicio para los santos.
. Ahora observa como empieza el capítulo 12 y comprueba cuál es su primera demanda como tu ofrenda:
Darse algún importancia: Se refiere a la tendencia de alguno a sobrevalorar su propio valor o relevancia.
Si recordamos aquella oración hierático y consideramos este mandato, con la prudencia que se nos demandada, lo primero que descubrimos es que estamos sujetos al “principio de fidelidad”.
La iglesia debe usar las ofrendas y diezmos conforme a lo que dicen las Escrituras. Esto quiere sostener que se usarán para la extensión del reino de Dios, para sostener a los que predican my company la Palabra y para aliviar las necesidades de los que atraviesan dificultades económicas.
La Escritura hace referencia del diezmo sólo dos veces antiguamente de que sea regulada la Ley; a su oportunidad, lo hace como casos excepcionales en forma circunstancial, next no como tema específico.
Si esto le reclamaba a aquellos que todavía no habían gustado el beneficio de la Humor, cuanta más vigencia tiene para nosotros esta advertencia; que, dejando de flanco muchas veces los verdaderos principios de la clase tales como: la Ecuanimidad, la misericordia y la Certidumbre, algunos “sugieren” como obligación tener que “diezmar”.